La llamada “exposición de tercera mano a la nicotina” es un concepto relativamente novedoso, instalado en el año 2009, que describe los riesgos de salud derivados de la inhalación de residuos de tabaco depositados en superficies domésticas como alfombras, cortinados, almohadones, paredes, pisos, y, también en el interior de los automóviles. Estos residuos resisten la limpieza usual ya que la mayoría de los detergentes son alcalinos y para remover la nicotina se requieres soluciones ácidas como por ejemplo el vinagre; tampoco los elimina la aireación de las habitaciones.  

Además de la EPOC y el cáncer de pulmón, el consumo de cigarrillos constituye un importantísimo factor de riesgo de enfermedad cardiovascular.

La incidencia de enfermedad de las arterias coronarias en los fumadores es tres veces superior a la del resto de la población; y la mortalidad por esta afección es aproximadamente 70% más elevada en comparación con la de la población general.

En el pasado mes de setiembre, se llevó a cabo en Barcelona el Congreso Anual de Sociedad Respiratoria Europea (European Respiratory Society -ERS). Durante el evento se dieron a conocer los resultados de un estudio en el cual se analizó la eficacia de dos métodos para dejar de fumar comparando los cigarrillos electrónicos contra los parches de nicotina.