Asma en fumadores pasivos

El asma es una enfermedad en cuyo desarrollo y evolución intervienen múltiples factores, la contaminación ambiental por humo de tabaco es uno de los más importantes.

Según estudios realizados en distintos países entre un 20% y un 80% de la población está expuesta pasivamente al aire contaminado por humo de tabaco con los consecuentes riesgos que ello entraña para la salud respiratoria de niños y adultos.

 

La exposición al aire contaminado por humo de tabaco es la mayor causa prevenible de enfermedad

 


  Niños  

Varios trabajos realizados en población infantil confirman la relación entre la contaminación ambiental por humo de cigarrillo y un aumento de la frecuencia de “mayor sensibilidad bronquial” (hiperrespuesta bronquial), propensión a desarrollar alergia (sensibilización alérgica) y enfermedades respiratorias en general.

La exposición de los niños al humo del tabaco ocurre fundamentalmente en su hogar y en los lugares en los que juega. El tabaquismo materno es la mayor fuente de exposición durante la primera infancia y a medida que los niños crecen aumenta la importancia del humo procedente de lugares públicos.

Las investigaciones aportan evidencias de la fuerte relación entre el tabaquismo en el hogar y la aparición de sibilancias y asma en niños hasta los 6 años. Asimismo, en los niños con asma el pronóstico a largo plazo empeora si los padres son fumadores.

La exposición al humo de tabaco relacionada con padres fumadores influye negativamente en el desarrollo y evolución del asma infantil


  Adultos  

También en la población adulta está demostrada la relación directa de la exposición a humo de tabaco en el trabajo con la bronquitis crónica y el asma. Una investigación realizada en países de la Comunidad Europea sobre aproximadamente 8.000 adultos no fumadores comunica una relación entre la exposición al humo del tabaco en el ambiente laboral o el hogar y diversos síntomas respiratorios, además de una mayor prevalencia de asma.