Cambio climático y salud respiratoria

Está claro que la temperatura global en el planeta Tierra está aumentando gradualmente y se estima que, de no tomarse las medidas pertinentes, para el año 2100, habrá un aumente de 1.8 a 4.0˚C. Los gobiernos del mundo están implementando estrategias para tratar de asegurar que este aumento no exceda los 2˚C.

Sin embargo, incluso si estas medidas resultaran eficaces, no será posible evitar algún cambio en el clima. La humanidad debe prepararse para condiciones climáticas extremas, mayor contaminación y riesgo de inundaciones, mayores temperaturas y cambios en las estaciones.

Causas del cambio climático

  • 'Efecto invernadero' natural producido por el atrapamiento de calor del sol por parte de ciertos gases localizados en las capas inferiores de la atmósfera destinado a sustentar la vida. Las emisiones globales de los “gases del invernadero” son dióxido de carbono (CO2), metano (CH4) y óxido nitroso (N2O) han aumentado respecto de la era pre-industrial aproximadamente un 70% entre 1970 y 2004. Se sugiere que ésta es la causa de la continuidad de los aumentos de la temperatura global verificados desde mediados del siglo pasado.
  • Quema de combustibles fósiles para la generación de electricidad
  • Combustión de combustible durante el desplazamiento de vehículos
  • Eliminación inapropiada de los desechos

 

Cómo afecta el cambio climático la salud

La Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte acerca del profundo impacto del calentamiento global sobre algunos de los principales determinantes de la salud: productividad de alimentos, cantidad y calidad del agua, calidad del aire y la distribución de plantas y animales. Algunos de los efectos visibles del aumento de la temperatura son: la elevación del nivel del mar,  mayor derretimiento de los hielos, la nieve y los suelos congelados.  

 

Efectos del cambio climático:

  • Temperaturas extremas (ola de calor , frío)
  • Exposición a la radiación UV
  • Enfermedades transmitidas por alimentos y agua
  • Enfermedades transmitidas por vectores (mosquito)
  • Malnutrición y desnutrición
  • Aumento y cambios en la distribución de enfermedades infecciosas (tropicales y subtropicales)
  • Aumento de enfermedades respiratorias y alergias (altas concentraciones de ozono y partículas, y modificaciones en la distribución del polen)

 

La población más vulnerable al cambio climático son los niños, los ancianos y los pobres, los no tienen acceso a sistemas de salud y aquellos que ya padecen alguna enfermedad crónica (asma, EPOC, diabetes)

 

Cambio climático y salud respiratoria

• Crisis de asma

• Exacerbaciones de enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC)

• Rinosinusitis

• Infecciones del tracto respiratorio

  • Cambios en la temperatura.

Cambios en la frecuencia y distribución de infecciones (tropicales y subtropicales). Aumento de las internaciones y tasa de mortalidad en pacientes con asma y EPOC. Propagación de la gripe aviar por modificaciones en el patrón migratorio de las aves.

  • Contaminación del aire

Asociada a mayores niveles de ozono y partículas finas. Además, la escases de lluvias facilita los incendios forestales y por ende aumentan las partículas conocidas como hidrocarburos aromáticos policíclicos (HAP).

Síntomas respiratorios

Disminucion de la función pulmonar en especial en individuos con asma, adultos mayores, niños y pacientes con enfermedades respiratorias crónicas. Mortalidad por causa respiratoria (más frecuente en la población adulta)

  • Inundaciones

Las inundaciones favorecen el desarrollo de mohos, ácaros, y esporas Asma y la rinitis alérgicas.

  • Temporales

Durante estos eventos suele haber fuertes descensos de temperatura y aumento del ozono.

Epidemias de asma.

 

Es fundamental concientizar a los gobiernos y a las entidades de salud sobre las tendencias evolutivas de las enfermedades relacionadas con los cambios climáticos

 

Colaboremos

Como ciudadanos, además de cuidar el medio ambiente debemos mantener las temperaturas constantes en el hogar evitando, al mismo tiempo, el encierro para evitar la formación de levaduras y hongos.

Son estrategias útiles para reducir las emisiones de carbono: desplazarse a pie o en bicicleta; disminuir el uso de automóviles; trasportar más pasajeros en un único auto; usar el transporte público.