Smog

La contaminación de la atmósfera –smog- puede aumentar el riesgo de enfermedades cardiacas y pulmonares, incluyendo muerte prematura. 

El efecto perjudicial de la exposición a contaminantes atmosféricos podría manifestarse varias décadas después, hasta treinta años, es la conclusión a la arribaron la Dra. Anna Hansell y colaboradores, del Colegio Imperial de Londres tras un relevamiento de casi 40 años durante los cuales se realizó una evaluación exhaustiva de la exposición al smog.

El estudio consistió en medir la calidad del aire desde los años 70’, en áreas de Inglaterra y Gales. Las estimaciones de los niveles de contaminación se realizaron en 1971, 1981, 1991 y 2001 cuantificando “unidades de contaminación por metro cúbico de aire”. Entre 1971 a 1991 se evaluaron humo negro y dióxido de azufre, dos contaminantes producidos principalmente a partir de la quema de combustibles fósiles, como el carbón y el petróleo. También se midió la contaminación particulada asociada fundamentalmente con las fuentes naturales, como la tierra y la sal marina, además de la actividad industrial y de construcción. Paralelamente se monitoreó la salud de 368.000 habitantes de esas regiones, en particular se investigaron la presencia de enfermedades pulmonares (bronquitis, EPOC y neumonía y cáncer) y la mortalidad por enfermedad cardiaca.

Los investigadores hallaron que un habitante de un área más contaminada en 1971 tenía un riesgo más alto de mortalidad. Más específicamente, cada unidad adicional de contaminación por metro cúbico de aire representó un aumento del riesgo de muerte del 2% entre los años 2002 y 2009. La diferencia resultó aún mayor al evaluar a aquellos con una exposición más reciente al smog. Por cada unidad adicional de contaminación adicional en 2001, el riesgo de mortalidad entre 2002 y 2009 aumentó un 24%.

En términos generales las personas con mayor nivel de exposición, en 1971 o 2001, tuvieron un riesgo 14% más alto de fallecer entre 2002 y 2009 en comparación con individuos que había vivido en un área menos contaminada.

 

En este estudio se observó una asociación estadisticamente significativa entra la exposición al smog y la mortalidad