Si bien la nebulización es una modalidad de administración de medicamentos en esta nota se abordarán aspectos relacionados con su uso que resultan independientes del fármaco administrado.
Después de la nebulización suele quedar en el tubo de conexión un pequeño volumen de solución que puede ser contaminado por bacterias. Es por ello que la limpieza y el mantenimiento del equipo son primordiales para evitar el riesgo de infección pulmonar asociado al uso del nebulizador.
Cómo se usa el nebulizador
- Leer cuidadosamente las instrucciones del médico relacionadas con la dosis de la medicación, el modo de preparación, la forma de colocación en el equipo y el tiempo de nebulización.
- Lavarse minuciosamente las manos
- Preparar la solución a nebulizar inmediatamente antes de la sesión. Medir exactamente la dosis de medicamento y colocarla en la cámara o reservorio del nebulizador. Agregar la cantidad indicada de solución salina o agua indicada.
- Ajustar la mascarilla o la boquilla en la cara o en la boca.
- Encender el compresor
- Durante el tratamiento el paciente debe estar sentado y erguido; sin hablar
- La respiración debe hacerse a un ritmo normal, inspirando lenta y profundamente por la boca y reteniendo el aire 1 ó 2 segundos. Luego se puede exhalar el aire.
La nebulización puede quitar el apetito cuando se efectúa cerca de las comidas |
Procedimiento de lavado
- Desmontar todas las piezas del equipo, incluyendo la boquilla o mascarilla
- Vaciar el líquido condensado en el tubo al exterior
- Lavar con agua y jabón; enjuagar y secar minuciosamente
- Guardar en un lugar seco
Lavar las piezas al finalizar cada nebulización o, al menos, una vez al día. |
Mantenimiento
- Semanalmente: desconectar el sistema de la red eléctrica y limpiar el compresor y el tubo con un paño húmedo
- Anualmente realizar revisiones
- Piezas descartables: cambiar los tubos, mascarillas y boquillas cada tres o seis meses
- Piezas permanentes: hervirlas en agua con poca cantidad de detergente aproximadamente cada 30 sesiones
El tubo, el nebulizador y la mascarilla o boquilla deben ser de uso exclusivo para cada paciente. |
Precauciones
La liberación del medicamento al aire de la habitación puede ser perjudicial para otras personas que no sean el mismo paciente.
Cuando se empleen antibióticos se recomienda hacerlo en una habitación con la puerta cerrada y bien ventilada.